Trasteando con el mismísimo Sigma 18-35 mm f1.8, una Canon EOS 7D y la “superluna” en vísperas de Sant Joan.

Visto el exitazo del koala-mapache-burro de la semana pasada, creo que ha llegado el momento de volver a los clásicos habaneros.
Nada como dejar pasar unos meses (y quedarse sin fotos en la nevera) para empezar a revisar aquellas que en su momento quedaron apartadas. Y, oye, con un par de cortes por cada lado, un poco de horizonte recto y el típico viñeteo queda hasta pasable.


La instantánea más conocida de Alberto Korda -y posiblemente una de las imágenes más reproducidas del planeta- convertida en mural en la fachada del edificio del Ministerio del Interior de Cuba, en la Plaza de la Revolución de La Habana.
La historia de esta fotografía y de su autor -que nunca cobró derechos de autor- es de sobra conocida, pero por si alguien quiere refrescar la memoria, aquí un brevísimo resumen.

El Malecón de La Habana es, posiblemente, uno de los lugares más fotografiados del mundo. Pese a ello y, lo que es peor, pese a la evidencia de que no va a ser posible mejorar lo ya hecho, uno no puede resistir la tentación de intentarlo. Decenas de veces, además.
A la vuelta una de ellas con un par de toque de Lightroom consigue llamarte la atención. Ahí va mi aportación a la colección de postales, piensas.

Y justo entonces mueves un poco la herramienta de recortar, reencuadras y ya no sabes cual te gusta más. O cual es la menos mala.


Una de esas postales que seguro que encanta a los amigos de Libertad Digital y demás pensadores liberales. Con un poco de suerte igual hasta consigo hacerme un hueco durante este nuevo curso en una de las imprescindibles tertulias de Intereconomía.


Se suele decir que los buenos fotógrafos necesitan pocos disparos para conseguir unas cuantas instantáneas decentes. Supongo que por eso un servidor acaba de volver de Cuba con una Canon EOS 7D echando humo y un disco duro de Epson cargado de más de 40 GB de fotos.
Es una cuestión de pura probabilidad. ¡Alguna buena tiene que haber salido!
Nuevo concurso de fotografía en QUESABESDE.COM, esta vez con un primer premio de lujo: una Canon EOS 7D junto al zoom 18-135 milímetros f3.5-5.6.
El tema es “fotografía deportiva”. Suficentemente amplio como para que cada cual busque su propio enfoque original al asunto. Se puede participar hasta el próximo día 30 de abril y el veredicto se hará público el 6 de mayo.
En apenas unos días ya se han recibido casi 600 fotos y por lo que se puede ver hasta ahora, el nivel está siendo bastante alto. Así que a ponerse las pilas, que el premio lo merece.

De paseo nocturno por Saint Andrews (Escocia), con la EOS 7D y su 12800 ISO a cuestas.
El único problema de este tipo de postalistas nocturnas tan aparentes -¿no ha quedado mal no?- es que uno está medianamente satisfecho hasta que ve, por ejemplo, el trabajo que el otro día presentó Manel Soria en la Societat Catalana de Fotògrafs de Natura y descubre lo que son fotografías nocturnas de verdad.
Por cierto, pensando en como poder meter fotos un poco más grandes -a veces se agradece que sean pequeñas para que no se vea la chapuza en el procesamiento, pero en fin- sin tener ni puñetera idea ni ganas de enredar en diseños o plantillas del blog, Mauro propone una solución muy bilbaina: tus fotos de Flickr en plan “The Big Picture”. Con un par. El resultado es realmente espectacular.

Ha sido una de las primeras paradas obligatorias dentro de esta visita a IFA 2009: la carpa de Canon y, sobre todo, la nueva y flamante EOS 7D.
En breve en QUESABESDE.COM publicaremos un primera artículo de toma de contacto y uno de esos apasionantes vídeos en los que repasamos y vemos de primera mano las prestaciones más importantes de esta cámara.
Pero no es ningún secreto que su lista de novedades es sencillamente apabullante y entre las manos transmite una sensación que poco tiene que envidiar a la EOS 5D Mark II.
Entonces, ¿quién no puede estar féliz con semejante evolución de la saga APS-C de Canon? De entrada me imagino que Nikon -su D300s reinaba sola hasta ahora en este terreno- y Pentax, que acaba de lanzar una K-7 que apunta precisamente tan alto como este modelo.
Tampoco hay que olvidarse de todos aquellos profesionales que esperan desde hace tiempo el relevo de la EOS 1D Mark III y que estaban convencidos que -ahora sí- la Mark IV estaba lista.
¿Y los fieles usuarios de la marca? Aquí viene el punto delicado porque, una vez más, ha quedado patente que el mercado fotográfico ha copiado ese tic tan informático que viene a decir que en el momento que estás comprando un ordenador, en el almacén ya está entrando uno con mejores prestaciones y más barato.
Algo así es lo que pueden estar pensando todos aquellos que hace poco se han comprado una EOS 5D Mark II para aprovechar sus virtudes en el terreno del vídeo. Obviando el detalle del formato completo -en vídeo no es ni mucho menos tan importante como en foto- resulta que la EOS 7D es más barata, está igual de bien construida y, además, permite hacer cosas (24p, 25p…) que algunos echan en falta en la 5D Mark II.
¿Saldrá Canon al rescate de estos compradores con una actualización de firmware? Tendrá que ser pronto, porque me cuenta Valentín que en algunos círculos germanos la noticia no ha sentado muy bien: